El espectáculo siempre debe continuar. Este popular dicho del mundo del espectáculo no podría ser más cierto para el esforzado personal del ACT Theatre de Seattle. Como nos explicó Jessica Howard, directora de ventas y marketing del teatro, ACT pone todo su empeño en sus producciones. "Somos una productora propia", explica Jessica. "Eso significa que pagamos y construimos los decorados, comercializamos los espectáculos y buscamos y pagamos a los actores".
Como era de esperar, todo su trabajo tiene un precio elevado y deja poco dinero para el personal y las oficinas. "A veces alguien nos pide algo para su oficina, pero luego nos enteramos de que tenemos que comprar algo para el plató o contratar a un actor", explica Jessica. "No es algo que podamos hacer porque aquí todo el mundo se preocupa por el arte y no sacrificaría eso por una cosa nueva y brillante para la oficina, independientemente de lo mucho que lo necesiten".
La mayor necesidad del personal, según Jessica, eran sillas nuevas. "Nuestras sillas estaban destartaladas", dice Jessica. "A algunas les faltaban ruedas, otras ya habían pasado su mejor momento y otras simplemente daban asco. Algunos de los empleados empezaron a traer cosas de casa para compensar las que tenían estropeadas en la oficina".
En otoño de 2015, Green Standards empezó a trabajar con una empresa tecnológica multinacional estadounidense y facilitó la donación de 40 sillas de trabajo al personal del ACT Theatre para sustituir sus viejas sillas.
"Nos alegramos mucho cuando nos llamasteis", dice Jessica. "Muchas gracias por la donación. Nos ha animado a todos".
"Es muy agradable no tener más problemas de espalda".
Con tres plantas administrativas llenas de personal 
y sillas de oficina pasadas de moda, las nuevas sillas fueron una grata donación para los miembros de ACT. "Las sillas se pusieron inmediatamente a disposición del personal", dijo Jessica. "No podían esperar a coger su nueva silla después de que nos las entregarais".
"Es muy agradable no tener ya problemas de espalda", dice Jessica, con una ligera risita. "Estas sillas son mucho mejores que las que nos rompían la espalda".
Aunque el personal de ACT necesitaba las nuevas sillas, Jessica cree que nunca las habrían conseguido sin la donación. "Todas las cosas brillantes que conseguimos van a parar al escenario", explica Jessica. "Es algo que siempre hemos necesitado, pero no podíamos sacrificar los fondos para salir a comprar cuando tenemos espectáculos que producir".
Además de hacer una inversión tangible en su comunidad, la empresa tecnológica estadounidense también contribuyó a beneficiar al medio ambiente. Al evitar que el mobiliario de oficina que ya no necesitaban acabara en el vertedero, optaron por hacer algo especial en lugar de contribuir a los efectos nocivos de los vertederos.
Acerca de ACT
Un teatro contemporáneo (ACT) se dedica a producir obras relevantes sobre temas contemporáneos. ACT nutre a artistas nuevos y experimentados, colabora con dramaturgos prometedores y artistas locales que trabajan en diversos medios, y conecta al público con muchas fases del proceso creativo. Situado en el corazón del centro de Seattle y al servicio de un público curioso, abierto y valiente, ACT es el único teatro local dedicado a producir obras contemporáneas con dramaturgos prometedores y artistas locales desde 1965.
